Afuera, en el patio, los pasos, como de gente que ronda. Ruidos callados. Y aquí, aquella mujer, de pie en el umbral; su cuerpo impidiendo la llegada del día; dejando asomar, a través de sus brazos, retazos de cielo, y debajo de sus pies regueros de luz; una luz asperjada como si el suelo debajo de ella estuviera anegado en lágrimas. Y después el sollozo. Otra vez el llanto suave pero agudo, y la pena haciendo retorcer su cuerpo.
-Han matado a tu padre.
-¿Y a ti quién te mató, madre?
Mi lista de blogs
-
-
-
-
-
Cuestión De AdaptarseHace 14 años
-
Se nos va de las manosHace 14 años
-
Avatares...¿contra la pirateria?Hace 14 años
-